Los programas de formación académica de posgrado reclaman niveles de calidad contrastados y contrastables, con un sistema de acciones que garanticen la excelencia académica de la oferta, enfocadas a consolidar la formación de profesionales que puedan mostrar un desempeño competente en la solución de problemas del contexto local, territorial y nacional, así como operar en los escenarios internacionales, lo cual tiene que ver con la calidad de los conocimientos, las habilidades y las actitudes adquiridas durante la formación. En la actualidad, no basta con declarar los niveles de calidad alcanzados, la sociedad exige la evidencia de su certificación por un órgano competente. En Cuba, el órgano designado por el Estado para implementar la política evaluativa con fines de acreditación y certificación de la calidad en la educación superior, es la Junta de Acreditación Nacional. El objetivo de este trabajo es brindar información sobre las buenas prácticas y los resultados alcanzados en los procesos de evaluación, acreditación y certificación de la calidad en la formación académica de posgrado, se enfatiza en los elementos necesarios a introducir, transformar o perfeccionar para lograr procesos eficaces y eficientes en la modalidad presencial o a través de plataformas virtuales. Se utilizaron métodos del nivel teórico (inductivo, deductivo, analítico y lógico histórico) y empíricos (análisis de documentos y criterios de especialistas). Los especialistas seleccionados son miembros del Registro de pares evaluadores, de los Comité Técnicos Evaluadores y del Pleno de la Junta, lo que garantizó el criterio de selección.