La importancia de la didáctica de las artes visuales radica en el hecho de que permite potenciar las capacidades creativas y expresivas del estudiante por medio de la experimentación, misma que sólo la imaginación y la creatividad pueden brindarle, causando, de esta forma, que pueda plasmar las inquietudes residentes en su mundo interior que se manifiestan a través de sus sentimientos y sensaciones. Asimismo, esta necesidad de expresión resulta ser un medio importantísimo de comunicación que favorece y facilita el proceso evolutivo de cada estudiante, además de que le ayuda a equilibrarlo y aumentar su capacidad emocional, perceptiva, intuitiva y analógica, sirve como una estrategia de conocimiento que permite el desarrollo de la percepción entre las relaciones que existen entre forma, objetos y colores, así como también permite identificar las relaciones entre los fenómenos socio-culturales que rodean al individuo en cuestión, generando diversos enfoques de pensamiento y acción que ayudan a potenciar el conocimiento en lugares poco transitados por la didáctica tradicional. Por lo tanto, resulta conveniente decir que al proporcionar todos estos beneficios, posee una gran relevancia dentro del contexto educativo, desarrollando en el estudiante las capacidades en ambientes presenciales o virtuales. El futuro de la didáctica de las artes visuales puede ser próspero siempre y cuando las técnicas de enseñanza-aprendizaje implementadas en el arte hasta ahora no se abandonen, sino que se renueven y también que se creen otras nuevas y mejoradas que aseguren la correcta formación tanto de los educandos, como de los docentes.